Mucho se habla si las pantallas dañan los ojos más que el papel. Los estudios serios revelan que, lo que realmente afecta a nuestros ojos son nuestros nuevos hábitos de vida. Cosas como la miopía siempre han existido y es por la forma del ojo, una variación de milímetros hace que una persona tenga o no una dificultad visual.

No obstante, ahora sabemos que no forzar los ojos al estar constantemente en espacios reducidos hace que el ojo se vea más afectado. Así una de las claves para cuidar nuestros ojos es “cambia de hábitos” juega en la calle, jardín o en espacios dónde puedas forzar la mirada a lo lejos para ejercitar los ojos. Algunos especialistas recomiendan ejercicios.

Hacer que un estudiante pase largas horas sentado estudiando papel o pantalla es agotador para los ojos. Prueba a “particionar tus periodos de estudio“. Estudia 20 minutos y descansa 10 minutos por ejemplo.

Es importante, no solo para los ojos, sino para el cerebro del estudiante, cuando estudia de noche que haya “iluminación adecuada”. Se cansan menos los ojos y no afecta a ciclo del sueño.

Si no te queda más remedio estudiar de noche, “intenta que sea la excepción”. El descanso ayuda a tu cerebro a grabar lo que estudias y ha estar en forma al día siguiente.